Abancay es la capital de la región de Apurímac y, aunque no es tan conocida como Cusco o Lima, tiene su propio encanto único. La ciudad está rodeada de montañas y tiene un clima agradable la mayor parte del año. Las calles principales, como la Av. Arenas y la Av. Perú, están llenas de vida con mercados locales, tiendas y restaurantes que ofrecen una muestra auténtica de la cultura peruanas.
No puedes dejar de visitar la Plaza de Armas, un lugar perfecto para relajarte y observar la vida diaria de los locales. También están el Parque Micaela Bastidas y el Mirador de la Loma, desde donde obtendrás vistas espectaculares de la ciudad y sus alrededores. Si te interesa la historia, el Museo de Sitio de Sayhuite es una parada obligatoria.
La gastronomía en Abancay es simplemente deliciosa. Prueba el cuy chactado y el chupe de camarones, dos platos que no olvidarás. Además, las danzas típicas, como la danza de los negrillos y la danza del carnaval abanquino, son un verdadero espectáculo de color y alegría.
Ahora, pasando a un tema más específico: el turismo sexual en Abancay. Si bien no es algo que se promocione abiertamente, existen zonas y establecimientos donde puedes encontrar estos servicios. En las calles más concurridas y en las afueras de la ciudad, especialmente en la noche, es posible encontrar prostitutas callejeras ofreciendo sus servicios.
Uno de los lugares más conocidos es «Las Peladitas de Abancay». Este prostíbulo es famoso en la región y tiene una variedad de servicios sexuales. Los costos varían, pero puedes esperar pagar alrededor de 100 a 200 soles por una sesión. Está ubicado en la calle Los Cipreses, a unas cinco cuadras de la Plaza de Armas. La infraestructura es bastante básica, pero cumple su función. Al entrar, encontrarás varias salas donde puedes elegir entre diferentes kinesiólogas y damas de compañía.
Si decides aventurarte en este tipo de turismo, es crucial que tomes ciertas precauciones para evitar riesgos:
Mi visita a Abancay fue una mezcla de cultura, aventura y nuevas experiencias. Si decides explorar esta ciudad, espero que mis recomendaciones te sean útiles y disfrutes al máximo tu estancia. ¡Hasta la próxima aventura!
